Rikuy Studio

Es un proyecto de diseño que transforma la contemplación en objeto.

Su nombre viene del quechua y significa “ver”. No mirar, sino ver con presencia, con intención.

Creamos piezas hechas por manos artesanas que honran el oficio, la raíz y la historia.

Cada objeto está diseñado para invitar a la pausa, al encuentro con uno mismo y con lo que realmente importa.

Rikuy no busca decorar espacios, sino habitarlos con sentido.

Desde la autenticidad, creamos desde la verdad, no desde la tendencia.

Nos mueve la transformación, donde lo vivido encuentra forma. Cada detalle tiene sentido: nada es decorativo, todo tiene intención.

Honramos el origen: trabajamos con materiales y procesos con raíz. Y por encima de todo, celebramos el oficio artesanal: manos que saben, que aprenden del tiempo.

“El diseño no decora: revela.”


Desde dónde creamos

Marco Colmenares (n. en Perú, 1980) es arquitecto egresado en 2004 de la Universidad Anáhuac. Vive y trabaja en la Ciudad de México.

Su vida ha sido un puente entre raíces, culturas y aprendizajes. A lo largo de su trayectoria, la búsqueda interior ha sido un motor constante. En ese proceso de transformación, donde convivieron el dolor y la paz, la obscuridad y la luz, descubrió que contar su propia historia no era un acto de ego, sino de verdad. Cree que cada ser guarda una gran historia que merece ser contada y que, al compartirse, abre caminos de crecimiento colectivo.

Ha desarrollado proyectos arquitectónicos en México en los ámbitos de la hotelería, lo residencial, la vivienda social y los servicios. De manera paralela, explora la creación de piezas de mobiliario y objetos contemplativos que se nutren de la herencia artesanal de México y de sus raíces peruanas.

RIKUY nació como un reflejo de ese viaje: no como un proyecto planeado, sino como la necesidad de dar forma a lo vivido. En cada creación hay algo de su historia, pero también una invitación a detenerse, contemplar y reconocerse en la propia.

Actualmente, trabaja en el desarrollo de RIKUY Studio, un espacio donde la contemplación se transforma en objeto y el diseño se convierte en un lenguaje de presencia.